Aunque la imparcialidad es uno de los sellos distintivos del periodismo, a menudo se habla de periodistas y medios de comunicación que inclinan la información para favorecer a personas o instituciones determinadas. Esta situación no es ajena a las radios de Tumbes.
Esta entrada intenta mostrar los puntos débiles encontrados en las radios desde la perspectiva de periodistas que han trabajado o trabajan en la actualidad para los medios de comunicación de Tumbes.
Las radios: la voz del tumbesino
Las radios de Tumbes permiten la difusión de noticias y eventos locales con mayor rapidez. Además, ofrecen diversas oportunidades de entretenimiento que los ciudadanos necesitan para hacer más amena su vida diaria.
En el capítulo del mapeo de medios y cibermedios de Tumbes del proyecto Media Map Perú se encontraron once estaciones de radio de tipo comercial en Tumbes. Estas emisoras ofrecen un contenido general a la población de la región entre música, noticias y opciones de difusión cultural.
Gastelo Heredia Zulmi, gerente general de la Corporación Hechicera de Tumbes, menciona que con la formación de radio La Hechicera y con la llegada de otras radios, la población fue la principal beneficiada.
La radio un medio que conecta
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (2018) a nivel nacional un 75.1% de peruanos consume el medio de la radio. En Tumbes 72 de cada 100 tumbesinos tiene acceso a este medio de información.
Es por ello que aunque la expansión de la televisión y prensa escrita en Tumbes sea amplia, la radio es el único medio que puede dirigirse al público sin distinciones y llegar hasta el último rincón de una complicada geografía como Casitas o Matapalo.
Con esto, los periodistas que trabajan en el medio deben tener la responsabilidad de satisfacer las necesidades de educar, entretener e informar a toda una región y así crear un espacio que de voz a los pobladores y represente la diversidad social, política y cultural.
Publicidad vs imparcialidad en las radios de Tumbes
La BBC en su artículo Imparcialidad, menciona que dicho término significa «dar a conocer la posición de cada hombre de la forma más precisa posible».
Considerando lo anterior, se entrevistó al periodista Marlon Castillo Castro y al actual redactor de corporación la Hechicera Manuel Iván Arselles García. Quienes poseen una perspectiva más local del problema encontrado en las radios de Tumbes:
Por su parte, el periodista Yony Girón Alberca, corresponsal de TvPerú, reafirma lo antes mencionado. Detalla el problema que no solo afecta a las radios de Tumbes sino que también a la televisión y prensa escrita: el chantaje.
Venta de espacios en la radio
El problema que da pie a esta falta de deontología profesional es el alquiler de espacios radiales a personas ajenas al medio. Asimismo, con frecuencia se habla del poco desarrollo y la alta carga opinativa que los periodistas tumbesinos le dan a la noticia.
De esta forma, si tenemos en cuenta el código ético de los periodistas, se especifica que todo profesional de la información debe asegurarse de utilizar un lenguaje neutral e imparcial, procurando la presentación de un informe objetivo.
Manuel Iván Arselles García, exredactor del diario el Correo de Tumbes y actualmente periodista de la corporación Hechicera menciona:
Empirismo en los periodistas radiofónicos
Marlon Castillo menciona que alrededor del 80% de periodistas en la zona norte son empíricos. Además, explica que el empirismo forma parte del problema que afecta a los contenidos de las radios tumbesinas.
De esta forma, existe una estrecha relación entre los contenidos expuestos en la radio y el número de periodistas empíricos en la región Tumbes.
Necesidad de capacitaciones para periodistas de las radios de Tumbes
Ante los problemas expuestos, surge la necesidad de capacitar al periodista para que de esta forma se eleve la calidad de los contenidos radiofónicos, tengan sensibilidad social, compromiso con la verdad y busquen el bien común sin abusar o denigrar a las personas.
Asimismo, es importante resaltar que la responsabilidad también recae sobre las emisoras de radio, pues antes de vender un espacio, la directiva debe colocar una serie de pautas que apelen al cumplimiento del código ético.
Finalmente, si bien es cierto el periodista como actor social tiene un compromiso con dar a conocer lo que ocurre, investigar a los políticos, denunciar abusos, velar por la libertad, crear debate y demás; estas labores deben desarrollarse con responsabilidad social para los radioyentes. Ese es el único camino para lograr informar con imparcialidad y veracidad en aras de entregar un contenido de calidad que construya comunidad.
